Una experiencia significativa y ejemplar: la animación misionera vivida en comunión
Un hecho significativo y ejemplar caracteriza una parte de la Animación Misionera que realizamos en España y es que la hacemos conjuntamente los diferentes institutos misioneros masculinos y femeninos que tenemos como identidad y carisma la misión ad gentes. También los sacerdotes diocesanos del IEME y los laicos misioneros de OCASHA pertenecen a la misma plataforma denominada SCAM, es decir, Servicio Conjunto de Animación Misionera. La historia tiene ya más de 50 años. Nuestro interlocutor cuando nos hacemos presentes en una diócesis para llevar a cabo una campaña de animación misionera es siempre el delegado o delegada diocesano de misiones (OMP). Contamos también con el apoyo del Director Nacional de las OMP que hace de interlocutor de cara a los delegados diocesanos cuando es necesario para favorecer nuestro servicio.
Hemos ido recibiendo progresivamente y de manera repetida el reconocimiento oficial también por parte del episcopado español (CEE) en alguna de sus asambleas plenarias.
Nos reunimos todos los años dos veces en asamblea, una en junio de carácter más organizativo. En ella compartimos el trabajo realizado, las inquietudes, propuestas o dificultades. También el dinero -fruto de nuestro trabajo y don de las diferentes diócesis y de las OMP nacionales- que durante las campañas nos han dado, lo ponemos en común repartiéndolo equitativamente en función del trabajo realizado (jornadas) por cada misionero o misionera. La asamblea de septiembre tiene siempre un carácter formativo, escogemos temas y ponentes en función de las situaciones, dificultades, oportunidades que vivimos a nivel social, cultural, eclesial o del mundo juvenil porque no olvidamos lo vocacional. Reina entre nosotros un buen espíritu de colaboración y comunión.
A lo largo del año tenemos también reuniones de provinciales; del llamado equipo de reflexión que suele preparar las asambleas; y de los coordinadores de cada una de las zonas.
Nuestras asambleas fueron en un tiempo muy participadas y animadas. En el momento actual atravesamos algunas dificultades, una de ellas que nos afecta a todas las congregaciones misioneras es el envejecimiento de nuestros hermanos y hermanas y el menor número de misioneros dedicados a tiempo pleno al servicio de la animación misionera. Lo sienten más algunas congregaciones femeninas que, aun queriendo hacerse presentes en las asambleas del SCAM después no tienen a ninguna hermana disponible o liberada para realizar el trabajo de animación misionera a lo largo del curso. Desde hace algunos años sentimos la ausencia de alguna de estas congregaciones.
Es evidente que sufrimos -al igual que la Iglesia en su conjunto- el llamado “invierno eclesial”: el contexto de increencia e indiferencia religiosa que invade el ambiente cultural que respiramos, y que se hace más palpable en el ámbito vocacional o generativo.
Pero al mismo tiempo nuestro rostro es más intercultural porque al grupo de animadores del SCAM se han unido hermanos y hermanas de nuestras congregaciones provenientes de otros continentes y de otras iglesias locales, lo cual embellece el rostro de nuestra animación al tiempo que interpela también a los destinatarios (en su mayoría adolescentes y jóvenes) de nuestro servicio misionero de animación.
Recientemente -en 2017 y 2018- hemos renovamos nuestro directorio incorporando en él, además de la dimensión organizativa, elementos de teología y espiritualidad misioneras actualizados que nos pueden enriquecer y servir de referencia.
Los que quieran saber más pueden descargar el documento .PDF: “SCAM. Servicio Conjunto de Animación Misionera. Directorio.” donde encontrarán las distintas aportaciones, muy enriquecedoras: “Teología y espiritualidad misioneras”, “Una espiritualidad para el SCAM” y “Los Institutos Misioneros en las diócesis españolas: una historia viva”.
Carlos COLLANTES, sx
